Por Clive Wall, Director General de Fineline UK
El año 2021 comenzó con muchos retos en la cadena de suministro de placas de circuito impreso: el aumento de los costes y los plazos de entrega, los problemas de material y capacidad y las interrupciones en el transporte.
En tiempos de turbulencia, los clientes pueden beneficiarse de trabajar con distribuidores de valor añadido (VAR). Estas empresas mejoran el producto mediante sus servicios y los clientes tienen acceso a su experiencia en toda la cadena de suministro.
Algunas consideraciones a tener en cuenta...
Asegurarse de que su cadena de suministro está totalmente auditada por un auditor cualificado: las fábricas deben superar estrictos procesos de aprobación y contar con las acreditaciones pertinentes. Contar con un equipo local de calidad in situ, que trabaje directamente con las fábricas para mantener y mejorar el rendimiento, es importante para establecer relaciones sólidas.
Los buenos VARs tendrán un profundo conocimiento de la evolución del mercado y del entorno empresarial. Deben ser versátiles y ágiles, con canales de comunicación con el cliente abiertos y la capacidad de adaptar sus cadenas de suministro para satisfacer las necesidades del cliente e impulsar el éxito futuro.
Un socio de la PCB que muestre resistencia para superar los riesgos y las interrupciones tiene un valor incalculable.
Esto también se aplica a la resistencia financiera. Los VAR más fuertes apoyan a sus socios fabricantes desde el punto de vista financiero, para que puedan adquirir materiales y ayudar al flujo de caja, al tiempo que apoyan a los clientes con acuerdos de almacenamiento ampliados.
La resistencia puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso. Los VAR de PCB con versatilidad, agilidad y resistencia son más importantes que nunca para aportar flexibilidad a su cadena de suministro de PCB, y éxito a su negocio.
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